El cometa interestelar 3I/ATLAS ha generado gran revuelo en las redes sociales y la comunidad científica al retomarse una teoría polémica propuesta por el astrofísico Avi Loeb. Según esta teoría, existe la posibilidad de que este visitante de otro sistema solar pase tan cerca de Júpiter que incluso podría dejar objetos no humanos a su alrededor. La afirmación, impactante y susceptible de malinterpretación, se basa en un hecho real: 3I/ATLAS llevará a cabo en marzo una maniobra extremadamente precisa, pasando a tan solo 160 mil millas del límite del Hill radius de Júpiter, la región donde el planeta puede capturar objetos y convertirlos en satélites temporales. Esta proximidad, junto con la aceleración no gravitacional que ha mostrado el cometa en los últimos meses, ha dado pie a teorías que van desde lo técnico hasta lo especulativo. Es en este punto donde Avi Loeb vuelve a ser protagonista. Avi Loeb , quien previamente sugirió que el objeto interestelar 'Oumuamua podría haber sido artificial, argumentó lo siguiente: Son coincidencias que merecen atención. Según Loeb, si un objeto interestelar quisiera depositar dispositivos, sondas o artefactos pequeños en un planeta gigante sin gastar demasiada energía, pasar cerca del Hill radius de Júpiter sería una opción estratégica. En resumen: si el cometa transportara materiales, fragmentos sólidos o incluso tecnología (en un escenario altamente especulativo), Júpiter podría capturarlos. A pesar de estas teorías, la mayoría de la comunidad científica mantiene una postura conservadora: para la mayoría de los astrónomos, 3I/ATLAS es simplemente un cometa raro, activo y complejo, pero completamente natural. Sin embargo, Loeb insiste en que la combinación de factores merece ser investigada por instrumentos en órbita. El astrónomo sugiere que la misión Juno, actualmente estudiando el gigante gaseoso Júpiter, realice una inspección en primavera para verificar si: Aunque la probabilidad real es muy baja, la idea ha causado sensación en las redes sociales debido a lo llamativa que resulta: un cometa interestelar dejando algo en Júpiter como si siguiera un plan. Esta narrativa reúne todos los elementos que hacen viral un tema espacial: Lo concreto y verificado hasta ahora: Fuente: Publimetro
El misterio del cometa interestelar 3I/ATLAS ha vuelto a captar la atención de la comunidad científica luego de que nuevas imágenes tomadas por astrónomos aficionados revelaran un comportamiento desconcertante desde el punto de vista de la física convencional. El renombrado astrofísico Avi Loeb, una figura destacada en el debate sobre objetos interestelares, planteó que la aceleración inusual observada en el visitante no se ajusta a lo esperado para un cometa natural, sugiriendo en cambio la posibilidad de que esté siendo impulsado por algún tipo de propulsión propia. Según Loeb, los nuevos cálculos realizados a partir de imágenes capturadas entre el 22 y 24 de noviembre muestran una cola y una anti-cola excepcionalmente largas. Para lograr la aceleración detectada, un cometa convencional habría tenido que desintegrarse a gran escala en un corto período de tiempo, lo cual no concuerda con la forma relativamente intacta en la que se mantiene 3I/ATLAS. En palabras del científico, la aceleración medida no se corresponde con la pérdida de masa observada, lo que ha generado controversia en la comunidad científica. Loeb no afirma categóricamente que se trate de una nave espacial o que haya vida involucrada. Su argumento se centra en la posibilidad de que la aceleración sea resultado de algún sistema de propulsión, incluso uno básico, lo cual explicaría de manera más coherente los datos observados. Las imágenes tomadas desde Japón, España y Chile muestran una anti-cola extremadamente densa orientada hacia el Sol, con una fuerza aparente capaz de contrarrestar el viento solar. Esta peculiaridad ha llevado a plantear si 3I/ATLAS está expulsando material de manera desconocida o si estamos ante un fenómeno sin precedentes en un objeto proveniente del exterior del Sistema Solar. El cometa alcanzará su punto más cercano a la Tierra el 19 de diciembre, a una distancia segura pero lo suficientemente próxima como para permitir observaciones más detalladas a través de telescopios como el Hubble y el James Webb. La incógnita sobre la naturaleza exacta de 3I/ATLAS permanece abierta hasta que lleguen los datos adicionales en diciembre, según Loeb quien afirma que el veredicto dependerá de los datos que lleguen en diciembre. Fuente: Publimetro
La Administración Nacional de Aeronáutica y el Espacio (NASA) ha publicado nuevas imágenes del cometa 3I/ATLAS, el tercer objeto interestelar identificado que ha atravesado el sistema solar. Desde su descubrimiento el 1 de julio, la agencia espacial ha mantenido un riguroso seguimiento de este cuerpo celeste. Las imágenes más recientes fueron obtenidas por naves espaciales operadas desde Marte tras el paso del cometa el 3 de octubre, a una distancia de 30,6 millones de kilómetros, permitiendo un análisis detallado de sus características y composición. El Orbitador de Reconocimiento de Marte (MRO) capturó algunas de las imágenes más cercanas del cometa, mientras que el orbitador Atmósfera y Evolución de Materiales Volátiles de Marte (MAVEN) obtuvo imágenes en el espectro ultravioleta que resultan cruciales para que los científicos comprendan la composición química del cometa. El 9 de octubre, la nave MAVEN registró otra imagen del cometa 3I/ATLAS que evidencia “el halo de gas y polvo o la coma, alrededor del cometa”. La NASA destaca que estos tonos brillantes indican áreas donde se detectaron átomos de hidrógeno provenientes del cometa. La NASA subraya que observar al cometa desde múltiples posiciones orbitales proporciona una oportunidad excepcional para comprender cómo 3I/ATLAS se diferencia de los cometas nativos del sistema solar. De acuerdo a la agencia, estos estudios “abren a los científicos una nueva ventana para observar cómo las composiciones de otros sistemas pueden diferenciarse de la composición del nuestro”. Respecto al origen del cometa, Tom Statler, investigador de la NASA, ha indicado que “3I/ATLAS lleva mucho tiempo viajando” y procede de un sistema “más antiguo” que el nuestro. El estudio del cometa ha permitido a la comunidad científica “comprender mejor cómo es el cometa” y determinar su trayectoria futura. Una pregunta recurrente es si el cometa podría contener tecnología alienígena. La respuesta proviene de Nicky Fox, administradora asociada de la NASA: “Es natural preguntarse qué es este objeto. Si entiendes un poco de cometas y asteroides, puedes identificar sus signos rápidamente”. Fox descarta especulaciones sin fundamento científico y destaca las diferencias significativas que presenta este cometa en comparación con otros. “Lo interesante son las diferencias, y este cometa viene de otro lugar. Es la tercera vez que podemos rastrear un objeto como este. Pero fuimos muy rápidos en detectar que era un cometa. Lo verdaderamente interesante es que no es exactamente como otros cometas, es algo anterior a nuestros tiempos”, afirmó Fox. La comunidad científica está emocionada por compartir las nuevas imágenes y los hallazgos sobre el cometa 3I/ATLAS. Estos descubrimientos abren nuevas perspectivas sobre la composición y origen de este cuerpo celeste único en su clase en nuestro sistema solar. Fuente: Meganoticias
No es casual que las personas más persuasivas y seguras de sí mismas sepan también cómo vestirse. Detrás de esa elección aparentemente banal se esconde la colorimetría, una disciplina que estudia cómo los colores influyen en la percepción y las emociones. Nuestra mente responde al color de manera inmediata, incluso antes de procesar la forma o el contenido. Por eso, un tono elegido con acierto puede modificar por completo el impacto interpersonal. La colorimetría estudia la percepción física del color y nos da una guía para tomar decisiones que generen armonía y credibilidad. En otras palabras, la inteligencia también puede expresarse a través del color de tu ropa. Azul, negro y blanco: la tríada de la mente lúcida Entre todas las gamas posibles, hay tres colores que se repiten en quienes proyectan equilibrio y seguridad. El primero es el azul, asociado al cielo y al mar, y, por tanto, a la estabilidad y la confianza. Transmite calma, autoridad y fiabilidad, aunque también cierta distancia emocional. No es casual que sea el color preferido para entornos laborales o entrevistas importantes: inspira competencia y serenidad. El negro, por su parte, representa poder, elegancia y sofisticación. Pero su uso constante puede transmitir frialdad o tristeza. Cuando se lleva con estilo puede resultar magnético, pero si se abusa de él, puede generar desconfianza. En el punto medio está su fuerza: en una prenda bien combinada o en un acento dentro del conjunto. El blanco, en cambio, evoca pureza y claridad. Es el color del orden y de la apertura mental, aunque también del perfeccionismo. Es un color que transmite equilibrio. La verdadera elección inteligente Pero aunque estos tres colores sean los más habituales entre personas con alto coeficiente intelectual, la clave no está tanto en imitarlos como en saber qué tonos encajan con nosotros mismos. Lo realmente inteligente quizá no es vestirse de azul, negro o blanco sin más, sino hacerlo con autoconocimiento. En la forma de combinar y llevar los colores se revela mucho más que el gusto: se revela la mente.
La NASA ha convocado a un comité de observación para estudiar el comportamiento, composición química y trayectoria del cometa interestelar 3I/ATLAS, que podría ser más antiguo que el propio Sol. Este cuerpo celeste es uno de los pocos objetos de su tipo detectados en la historia y varias agencias espaciales esperan poder estudiarlo en detalle mientras se desplaza rápidamente al interior de nuestro Sistema Solar. Según reporta La Nación de Costa Rica, el cometa 3I/ATLAS viaja a una velocidad de 60 kilómetros por segundo, el doble de la velocidad a la que se mueve la Tierra en su órbita. Esta velocidad se ve potenciada por su acercamiento al Sol y por su origen más allá del Sistema Solar. A diferencia de los asteroides, los cometas están compuestos de hielo y polvo, lo que provoca que al acercarse al sol se calienten y comiencen a liberar gases formando sus características colas que pueden extenderse por millones de kilómetros. Siendo un objeto interestelar, es decir, formado en otro sistema planetario, el análisis químico del 3I/ATLAS podría revelar materiales anteriores a la formación del Sistema Solar y generar nuevas teorías sobre la evolución de otros sistemas estelares. Los datos recopilados por astrónomos indican que el mayor punto de acercamiento del 3I/ATLAS con la Tierra ocurrirá el próximo 19 de diciembre, cuando pase a una distancia de 1,8 unidades astronómicas, equivalente a unos 270 millones de kilómetros. Aunque no será visible a simple vista, podrá observarse con telescopios medianos y grandes ubicados en regiones con cielos despejados, como en el norte de Chile. A pesar de estar bajo monitoreo de la Red Internacional para la Alerta de Asteroides de la NASA, no se ha emitido ninguna advertencia de impacto por parte del cometa. Solo se ha organizado una campaña de observación científica para estudiar este fenómeno astronómico único. Fuente: Meganoticias
El cometa interestelar 3I/ATLAS ha generado gran revuelo en las redes sociales y la comunidad científica al retomarse una teoría polémica propuesta por el astrofísico Avi Loeb. Según esta teoría, existe la posibilidad de que este visitante de otro sistema solar pase tan cerca de Júpiter que incluso podría dejar objetos no humanos a su alrededor. La afirmación, impactante y susceptible de malinterpretación, se basa en un hecho real: 3I/ATLAS llevará a cabo en marzo una maniobra extremadamente precisa, pasando a tan solo 160 mil millas del límite del Hill radius de Júpiter, la región donde el planeta puede capturar objetos y convertirlos en satélites temporales. Esta proximidad, junto con la aceleración no gravitacional que ha mostrado el cometa en los últimos meses, ha dado pie a teorías que van desde lo técnico hasta lo especulativo. Es en este punto donde Avi Loeb vuelve a ser protagonista. Avi Loeb , quien previamente sugirió que el objeto interestelar 'Oumuamua podría haber sido artificial, argumentó lo siguiente: Son coincidencias que merecen atención. Según Loeb, si un objeto interestelar quisiera depositar dispositivos, sondas o artefactos pequeños en un planeta gigante sin gastar demasiada energía, pasar cerca del Hill radius de Júpiter sería una opción estratégica. En resumen: si el cometa transportara materiales, fragmentos sólidos o incluso tecnología (en un escenario altamente especulativo), Júpiter podría capturarlos. A pesar de estas teorías, la mayoría de la comunidad científica mantiene una postura conservadora: para la mayoría de los astrónomos, 3I/ATLAS es simplemente un cometa raro, activo y complejo, pero completamente natural. Sin embargo, Loeb insiste en que la combinación de factores merece ser investigada por instrumentos en órbita. El astrónomo sugiere que la misión Juno, actualmente estudiando el gigante gaseoso Júpiter, realice una inspección en primavera para verificar si: Aunque la probabilidad real es muy baja, la idea ha causado sensación en las redes sociales debido a lo llamativa que resulta: un cometa interestelar dejando algo en Júpiter como si siguiera un plan. Esta narrativa reúne todos los elementos que hacen viral un tema espacial: Lo concreto y verificado hasta ahora: Fuente: Publimetro
El misterio del cometa interestelar 3I/ATLAS ha vuelto a captar la atención de la comunidad científica luego de que nuevas imágenes tomadas por astrónomos aficionados revelaran un comportamiento desconcertante desde el punto de vista de la física convencional. El renombrado astrofísico Avi Loeb, una figura destacada en el debate sobre objetos interestelares, planteó que la aceleración inusual observada en el visitante no se ajusta a lo esperado para un cometa natural, sugiriendo en cambio la posibilidad de que esté siendo impulsado por algún tipo de propulsión propia. Según Loeb, los nuevos cálculos realizados a partir de imágenes capturadas entre el 22 y 24 de noviembre muestran una cola y una anti-cola excepcionalmente largas. Para lograr la aceleración detectada, un cometa convencional habría tenido que desintegrarse a gran escala en un corto período de tiempo, lo cual no concuerda con la forma relativamente intacta en la que se mantiene 3I/ATLAS. En palabras del científico, la aceleración medida no se corresponde con la pérdida de masa observada, lo que ha generado controversia en la comunidad científica. Loeb no afirma categóricamente que se trate de una nave espacial o que haya vida involucrada. Su argumento se centra en la posibilidad de que la aceleración sea resultado de algún sistema de propulsión, incluso uno básico, lo cual explicaría de manera más coherente los datos observados. Las imágenes tomadas desde Japón, España y Chile muestran una anti-cola extremadamente densa orientada hacia el Sol, con una fuerza aparente capaz de contrarrestar el viento solar. Esta peculiaridad ha llevado a plantear si 3I/ATLAS está expulsando material de manera desconocida o si estamos ante un fenómeno sin precedentes en un objeto proveniente del exterior del Sistema Solar. El cometa alcanzará su punto más cercano a la Tierra el 19 de diciembre, a una distancia segura pero lo suficientemente próxima como para permitir observaciones más detalladas a través de telescopios como el Hubble y el James Webb. La incógnita sobre la naturaleza exacta de 3I/ATLAS permanece abierta hasta que lleguen los datos adicionales en diciembre, según Loeb quien afirma que el veredicto dependerá de los datos que lleguen en diciembre. Fuente: Publimetro
La Administración Nacional de Aeronáutica y el Espacio (NASA) ha publicado nuevas imágenes del cometa 3I/ATLAS, el tercer objeto interestelar identificado que ha atravesado el sistema solar. Desde su descubrimiento el 1 de julio, la agencia espacial ha mantenido un riguroso seguimiento de este cuerpo celeste. Las imágenes más recientes fueron obtenidas por naves espaciales operadas desde Marte tras el paso del cometa el 3 de octubre, a una distancia de 30,6 millones de kilómetros, permitiendo un análisis detallado de sus características y composición. El Orbitador de Reconocimiento de Marte (MRO) capturó algunas de las imágenes más cercanas del cometa, mientras que el orbitador Atmósfera y Evolución de Materiales Volátiles de Marte (MAVEN) obtuvo imágenes en el espectro ultravioleta que resultan cruciales para que los científicos comprendan la composición química del cometa. El 9 de octubre, la nave MAVEN registró otra imagen del cometa 3I/ATLAS que evidencia “el halo de gas y polvo o la coma, alrededor del cometa”. La NASA destaca que estos tonos brillantes indican áreas donde se detectaron átomos de hidrógeno provenientes del cometa. La NASA subraya que observar al cometa desde múltiples posiciones orbitales proporciona una oportunidad excepcional para comprender cómo 3I/ATLAS se diferencia de los cometas nativos del sistema solar. De acuerdo a la agencia, estos estudios “abren a los científicos una nueva ventana para observar cómo las composiciones de otros sistemas pueden diferenciarse de la composición del nuestro”. Respecto al origen del cometa, Tom Statler, investigador de la NASA, ha indicado que “3I/ATLAS lleva mucho tiempo viajando” y procede de un sistema “más antiguo” que el nuestro. El estudio del cometa ha permitido a la comunidad científica “comprender mejor cómo es el cometa” y determinar su trayectoria futura. Una pregunta recurrente es si el cometa podría contener tecnología alienígena. La respuesta proviene de Nicky Fox, administradora asociada de la NASA: “Es natural preguntarse qué es este objeto. Si entiendes un poco de cometas y asteroides, puedes identificar sus signos rápidamente”. Fox descarta especulaciones sin fundamento científico y destaca las diferencias significativas que presenta este cometa en comparación con otros. “Lo interesante son las diferencias, y este cometa viene de otro lugar. Es la tercera vez que podemos rastrear un objeto como este. Pero fuimos muy rápidos en detectar que era un cometa. Lo verdaderamente interesante es que no es exactamente como otros cometas, es algo anterior a nuestros tiempos”, afirmó Fox. La comunidad científica está emocionada por compartir las nuevas imágenes y los hallazgos sobre el cometa 3I/ATLAS. Estos descubrimientos abren nuevas perspectivas sobre la composición y origen de este cuerpo celeste único en su clase en nuestro sistema solar. Fuente: Meganoticias
No es casual que las personas más persuasivas y seguras de sí mismas sepan también cómo vestirse. Detrás de esa elección aparentemente banal se esconde la colorimetría, una disciplina que estudia cómo los colores influyen en la percepción y las emociones. Nuestra mente responde al color de manera inmediata, incluso antes de procesar la forma o el contenido. Por eso, un tono elegido con acierto puede modificar por completo el impacto interpersonal. La colorimetría estudia la percepción física del color y nos da una guía para tomar decisiones que generen armonía y credibilidad. En otras palabras, la inteligencia también puede expresarse a través del color de tu ropa. Azul, negro y blanco: la tríada de la mente lúcida Entre todas las gamas posibles, hay tres colores que se repiten en quienes proyectan equilibrio y seguridad. El primero es el azul, asociado al cielo y al mar, y, por tanto, a la estabilidad y la confianza. Transmite calma, autoridad y fiabilidad, aunque también cierta distancia emocional. No es casual que sea el color preferido para entornos laborales o entrevistas importantes: inspira competencia y serenidad. El negro, por su parte, representa poder, elegancia y sofisticación. Pero su uso constante puede transmitir frialdad o tristeza. Cuando se lleva con estilo puede resultar magnético, pero si se abusa de él, puede generar desconfianza. En el punto medio está su fuerza: en una prenda bien combinada o en un acento dentro del conjunto. El blanco, en cambio, evoca pureza y claridad. Es el color del orden y de la apertura mental, aunque también del perfeccionismo. Es un color que transmite equilibrio. La verdadera elección inteligente Pero aunque estos tres colores sean los más habituales entre personas con alto coeficiente intelectual, la clave no está tanto en imitarlos como en saber qué tonos encajan con nosotros mismos. Lo realmente inteligente quizá no es vestirse de azul, negro o blanco sin más, sino hacerlo con autoconocimiento. En la forma de combinar y llevar los colores se revela mucho más que el gusto: se revela la mente.
La NASA ha convocado a un comité de observación para estudiar el comportamiento, composición química y trayectoria del cometa interestelar 3I/ATLAS, que podría ser más antiguo que el propio Sol. Este cuerpo celeste es uno de los pocos objetos de su tipo detectados en la historia y varias agencias espaciales esperan poder estudiarlo en detalle mientras se desplaza rápidamente al interior de nuestro Sistema Solar. Según reporta La Nación de Costa Rica, el cometa 3I/ATLAS viaja a una velocidad de 60 kilómetros por segundo, el doble de la velocidad a la que se mueve la Tierra en su órbita. Esta velocidad se ve potenciada por su acercamiento al Sol y por su origen más allá del Sistema Solar. A diferencia de los asteroides, los cometas están compuestos de hielo y polvo, lo que provoca que al acercarse al sol se calienten y comiencen a liberar gases formando sus características colas que pueden extenderse por millones de kilómetros. Siendo un objeto interestelar, es decir, formado en otro sistema planetario, el análisis químico del 3I/ATLAS podría revelar materiales anteriores a la formación del Sistema Solar y generar nuevas teorías sobre la evolución de otros sistemas estelares. Los datos recopilados por astrónomos indican que el mayor punto de acercamiento del 3I/ATLAS con la Tierra ocurrirá el próximo 19 de diciembre, cuando pase a una distancia de 1,8 unidades astronómicas, equivalente a unos 270 millones de kilómetros. Aunque no será visible a simple vista, podrá observarse con telescopios medianos y grandes ubicados en regiones con cielos despejados, como en el norte de Chile. A pesar de estar bajo monitoreo de la Red Internacional para la Alerta de Asteroides de la NASA, no se ha emitido ninguna advertencia de impacto por parte del cometa. Solo se ha organizado una campaña de observación científica para estudiar este fenómeno astronómico único. Fuente: Meganoticias